El amplio sitio que ocupan todas las bancas de la capilla en donde reposan los restos del Beato Sebastián de Aparicio, y lo hermoso de sus antiguas pinturas, que por cierto narran la vida del Beato, nos deja saber que se está adentro de un sitio especial, valioso, profundo, de oportunidad de comunicación espiritual.
Nada distrae para enfocar la mente y el corazón en pedir o agradecer al Beato, su intercesión ante Dios por nuestras causas.
PINTURAS NARRAN SU VIDA
Es de admirar que en algún tiempo pasado, se hayan dedicado a idear y trazar todos estos cuadros, para explicar en verso, los pasajes más significativos de la
vida del Beato. Su vida desde que nació.
Tiene un aspecto de haber sido elaborado durante el periodo que existió la Nueva España.
Las imagenes están acompañadas de texto, que describen el suceso, y se cuidó el contenido y la rima.
Para dar un ejemplo: un pasajes se refiere a que una loba entró al cuarto donde estaba Sebastián de bebé, y le curó de un tumor.
Parte del texto que acompaña la imagen en el cuadro dice: "Le abre el tumor, le chupa condolida
Y amorosa lo lame de tal suerte
que el portentoso empeño de una fiera
su ya perdido aliento recupera".
Haciendo alusión a que siendo ya terrible para el niño la afectación, la loba se arriesga entre los humanos, arranca el maligno tumor, y lame la herida, salvando en sus últimos alientos, al niño.
Es muy bonito.
Lo que es un poco de lamentar es que varios de los textos e imagenes, están tan altos, que no es fácil verlos y leerlos todos a simple vista. El visitante se debe conformar con apreciar los que están más a su humana altura.
Un acierto es que han colocado abajo de esos enormes cuadros, unas cédulas que reproducen la pintura, y los textos, de modo que sin mirar los originales, el público puede conocer y aprovechar el contenido de ese invaluable material. Y quizá algún día, se haga una obra impresa de buena calidad, que contenga esas imagenes, esos textos, y poder conservar cada visitante interesado en ello, toda esa belleza. Poder disfrutarla en su casa, y no solo ahí parado entre bancas.
Como sea, antes no existían esas cédulas, y era casi imposible apreciar esos cuadros y las ideas expresadas a su lado. Quizá con el zoom de una cámara, o binoculares. Ahora ya puede apreciarse todo ese concepto.
PUERTA DESDE LA NAVE PRINCIPAL
Así se ve la capilla del beato Sebastián de Aparicio, desde la nave principal del Templo de San Francisco.
Esta reja dorada sirve para evitar que la gente pase desde la nave hacia la capilla. Pueden verla así, de lejos, y si gustan buscarán la manera de entrar, que está bastante bien señalizado.
EL FONDO O "RETABLO PRINCIPAL"
Es de una maufactura riquísima y detallada. En su centro, hay una pieza deslumbrante. Cualquiera sabrá al verla, que está en un sitio demasiado especial.
Y dicho fondo sirve de marco para la urna vidriada que protege el cuerpo incorrupto del Beato.
Puede verse que el contacto con las manos de los fieles, ha traido a veces el desprendimiento de pequeñas partes (de pies en la foto por ejemplo). Ya sea voluntario o no por parte de los creyentes, pero si ha tenido daños.
Un motivo que dio lugar a proteger sus restos.
En la última ocasión que visite al Beato, vi que la ventana de su urna, más cercana a sus pies, tenía varias cruces, hechas quizá con gis, no pude determinar bien con que están hechas. No me atreví a tocar el cristal que me han indicado respetar.
Pudiera ser con algo que si se quita, pero quizá no. No se si está permitido, o si se han hecho a escondidas. Ignoro si se limpian facilmente, o si tendrán que cambiar el cristal de esa parte.
Ignoro mucho al respecto. Solo se que no las había visto en visitas anteriores.
SU ORACION
La misma que se puede leer en el Templo de San Francisco en el centro histórico de la Ciudad de México, o en la Parroquia de Santiago apóstol, en Taltelolco, Ciudad de México.
El texto dice así:
"Glorioso Sebastián de Aparicio,
humildemente m presento ante ti para implorar tu protección.
Confieso que no soy digno por mis pecados de ser oido por Ti., pero confío que por la caridad que encendía tu corazón para rtu projimos que no podías ver una necesidad sin remediarla, tengas compasión de mi.
Mira que puedes interceder por mi ahora que gozas de la presencia de Dios, no me niegues tu protección.
Alcánzame de su Divina Majestad el remedio de la pena que me aflige si es para mayor Gloria de Dios y salvación de mi alma, si no, hágase en todo la voluntad de Dios.
¡Bendito sea su Santo Nombre!
Un Padre Nuestro, Ave María y Gloria por las necesidades de la Santa Iglesia".
BASE DEL ALTAR
Un gran nivel se levanta en la zona del altar, de modo que todo el conjunto de cuadernos para peticiones y agradecimientos, urna con cuerpo del Beato, están más alto que el resto de objetos en la capilla (bancas, letreros, etc).
Ese enorme basamento que hace que una sección esté más alta que la otra, tiene en su pared que miran los fieles desde las bancas, lo siguiente:
Año de nacimiento
Nombre
Año de fallecimiento
Altar
FRAGMENTO DE SU CASA NATAL
Una placa en el muro dice:
"25 de febrero de 1600
Fragmentos pétreso qeu formaron parte de la habitación que según la tradicióndio cobijo al entonces niño Sebastián de Aparicio, el que aquejado por la peste, fue salvado por una loba.
Traidos por el Licenciado Aldo R. Rivero desde el pueblo de la Gudiña, Provincia de Orense en España.
Conmemorando así el 399 aniversario de la muerte del:
Beato Fray Sebastián de Aparicio.
Puebla de los Ángeles
25 febrero de 1999"
PLACA DE AGRADECIMIENTO
Colocada el 8 de febrero de 2018, con motivo de la visita del Gobierno de la Orden de Frailes Menores.
PLACA DE MARMOL
Dicha placa dice:
"Haciendo tres veces con devoción delante de alguna reliquia de San Sebastián de Aparicio, "Gloria al Padre", "Gloria al Hijo", "Gloria al Espíritu Santo" etc, se ganan cuarenta días de indulgencia, siendo además este Santo, especial abogado para el acierto en la elección de estado, para no tener acreedores y obtener el sustento necesario para la vida".
He destacado en negritas el hecho de que en esta placa, ya se le considera Santo.
IMAGEN DE LA VIRGEN DE ZAPOPAN
IMAGEN DE LA VIRGEN DE LA MACANA
DETALLES DE LA URNA QUE CONTIENE CUERPO DEL BEATO
El muy fino trabajo orfebre que adorna la urna del Beato, resalta la devoción y entrega de quienes rodean y han rodeado la causa gloriosa de su persona.
Lograr la santidad del Beato tiene muchas formas de expresarse como deseo.
La gente brinda su cariño, su Fe, su devoción.
Lo quiere como abogado, como intercesor.
La belleza de la urna es un cariño a su persona.
En la parte baja de la urna, hay medallones, y cada uno contiene una escena, que es un pasaje de su larga e interesante vida.
Por ejemplo, en la siguiente imagen, en el primer medallón lo vemos de niño, cuando una loba le salva de una enfermedad cotagiosa y mortal. En el segundo se le ve, usando el hábito franciscano, cultivando. Probablemente refleje su estadía en el convento de Santiago de Tecali, donde fue cocinero, hortelano y limosnero.
En el siguiente grupo, lo vemos en el primer medallón, hablando con San Francisco, quien en el cielo le señala una carreta, que sería un artefacto novedoso en este continente americano y que favorecería tremendamente el desarrollo de los pueblos.
En el segundo medallón hay una carreta abajo, y junto a ella un grupo de personas. Pero en el cielo se ve una carreta que tiene una persona en ella, y los animales de tiro son coducidos por un ángel.
Después de la foto, pongo un recorte de ese bello detalle del segundo medallón.
En la siguiente imagen, en el primer medallón se ve a Sebastián areglando una rueda de su carreta. En el segundo, un par de ángeles le acercan alimento a Sebastián sentado.
(Martín Borboa Gómez)
